Badajoz. 02DIC2015. El pasado viernes, 27 de noviembre, Profesionales Cristianos – PX de la Diócesis Mérida – Badajoz celebró un acto público en el Centro Joven de Badajoz bajo el título “Experiencias de Fraternidad en el mundo profesional”, consistente en mesas de experiencias profesionales vividas desde la fraternidad.
Tras un año de análisis, reflexión y lectura creyente acerca de la vivencia de la fraternidad en los ámbitos profesionales, el movimiento organiza este acto con el objetivo de escuchar experiencias de vida de otras personas procedentes de ámbitos laborales, sociales y culturales cercanos.
En un contexto de diálogo y familiaridad, compartieron su vida Vicente -que se dedica al ejercicio de la abogacía-, Silvia -que está viviendo una etapa de paro laboral-, José Antonio – periodista– y Juan Carlos –enfermero en un centro de salud rural. Fueron invitados a compartir por militantes del movimiento, desde el convencimiento de ser personas identificadas como fraternales e inquietas en los ambientes en los que PX desarrolla tu misión, tratando que desde ellos se pudiera recibir la buena noticia de vivencias, que hacen explícito y real aquello que el Evangelio nos sugiere como levadura y sal en medio de la historia y del ser profesional. Cada uno aportó luz y ayudó a interpelar y animar en este camino de realización personal y fraternal a quienes estuvieron presentes.
Vicente mostró un itinerario de formación que venía desde ser friegaplatos a una formación seria en Derecho para ejercer un trabajo que le realizara como persona y que le diera sentido a su vida y a la de su familia. Todo ello desde la preocupación por un trabajo bien hecho en favor de los demás y con un sentido de justicia, así como de discernimiento moral para que la persona estuviera por encima del propio beneficio o lucro personal, tanto en su quehacer como abogado, como en las orientaciones a sus clientes que depositan su confianza en él.
Silvia, bióloga con un gran recorrido de formación y entrega en sus trabajos medioambientales y humanos, ha estado viviendo un parón laboral que le ha llevado a redefinirse personalmente, y a entregarse a la familia, sobre todo a la educación de su hijo, desde la búsqueda de una educación integral y alternativa que genere verdaderos valores y propicien una felicidad auténtica. En ese camino se ha encontrado con un colectivo de personas inquietas, con las que ha podido ir compartiendo su situación laboral y de búsqueda mutua y compartida de salidas y horizontes para todos. Tiene la experiencia de la fraternidad en una situación de paro, pero no de inactividad o alejamiento social, sino de comunidad y ayuda mutua en esa situación, sacándole incluso lo mejor para ella y los otros.
José Antonio, desde una normalidad deslumbrante en su silla de ruedas, mostró cómo lo que puede ser una limitación física la ha convertido en su vida en una herramienta de construcción personal para realizarse profesional y humanamente. Incluso la enfermedad cerebral de su hija le ha puesto en el disparadero de luchar por la normalidad social y de derechos de aquellos que sufren alguna situación de limitación física o intelectual. Desde ahí lee su trabajo profesional de periodista, y su quehacer en la revista GRADA, así como en la Fundación PRIMERA FILA, desde donde mueven, conciencian y comprometen a la sociedad para crecer en lo que ha de considerarse igualdad a fondo perdido. Una profesión y una vida que muestra sin contradicción, que el corazón tiene razones que la razón no entiende, pero que es capaz de moverla para que actúe y transforme, porque para el amor y la entrega nada es imposible.
Juan Carlos, enfermero en zona rural, mostró la experiencia de relaciones de fraternidad desde su ser coordinador en el Centro de Salud de Alburquerque. Hizo hincapié en las relaciones horizontales (de igual a igual), frente a las verticales, y en tener en cuenta que tu compañero/a es una persona, con su vida cotidiana, sus dificultades y mochilas propias. Además, recordó la importancia de la disponibilidad, la cercanía y el compañerismo en el ambiente profesional.
El acto finalizó con un rato de diálogo distendido, profundizando en las experiencias compartidas y leídas en el marco de la fraternidad.